10 de mayo del 2024
Washington, Estados Unidos. – La invasión a Rafah por el ejército de israelí se convirtió en el punto de desencuentro entre Estados Unidos e Israel, a tal punto que la Casa Blanca amenazó con no proveerle más armas.
“Cualquier tipo de gran operación en Rafah beneficiaría a Hamás en la mesa de negociación, no a Israel”, aseguró el portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, John Kirby.
El argumento de Estados Unidos es que la incursión provocaría más víctimas civiles, las cuales, serían usadas en la “retorcida narrativa” del grupo terrorista Hamás.
Asimismo, John Kirby mencionó que la ofensiva no ayudaría a Israel a cumplir su principal objetivo, que es lograr una victoria duradera contra el grupo militar islamista.
De igual manera, el portavoz dijo que continúa el diálogo entre los dos gobiernos, ante el cual han dado a conocer su postura, pero que ahora ellos “tendrá que tomar sus propias decisiones”.
Recientemente, el presidente Joe Biden mostró su preocupación ante una posible incursión de Israel, que podría impactar a más de un millón de personas que se encuentran refugiadas en Rafah, al sur de Gaza.
Reportes de la agencia de la ONU para refugiados palestino (UNRWA) indican que tanques israelíes avanzan hacia la zona.
Por su parte, el primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, reiteró: “Si tenemos que estar solos, lo estaremos”.
Netanyahu comentó que la operación en Rafah, que dio inicio el lunes, es una redada selectiva dirigida en la zona este de la ciudad, donde viven más de la mitad de la población gazatí.










