01 de octubre del 2024
Los hermanos Menéndez, Lyle y Erik, son conocidos por un caso criminal que capturó la atención de Estados Unidos a finales de los años 80 y principios de los 90. De acuerdo con varias declaraciones de los hermanos Menéndez, hay una película que los inspiró para llevar a cabo su crímen. ¿Cuál es esta cinta?
En 1989, Lyle y Erik Menéndez, entonces de 21 y 18 años respectivamente, asesinaron a sus padres, José y Kitty Menéndez, en su mansión de Beverly Hills, California. Este acto brutal no solo conmocionó a la sociedad por su violencia, sino también por las complejas dinámicas familiares que se revelaron posteriormente.
¿Qué película dicen los hermanos Menéndez que los inspiró para su crímen?
La serie de Netflix, “Monstruos: La historia de Lyle y Erik Menéndez”, es una serie dramatizada que está basada en hechos reales, que busca narrar el arresto, juicio y encarcelamiento de los hermanos Menéndez, por los crímenes que cometieron.
La serie detalla que los hermanos Menéndez declararon que la película de televisión «Billionaire Boys Club» (1987), los inspiró para llevar a acabo los asesinatos de sus padres.
En alguna parte de la serie de Netflix, los hermanos Menéndez se lo mencionan a la policía, y dicen que desde que vieron la película Billionaire Boys Club, comenzaron a planear su crimen.
En particular, hubo un detalle que llamó la atención de los hermanos Menéndez, y fue lo que los inspiró para matar a sus padres.
¿De qué se trata la película Billionaire Boys Club?
La película «Billionaire Boys Club» también está basada en hechos reales. La trama es sobre un grupo de jóvenes ricos de Los Ángeles, cuyo líder es Joe Hunt, quienes fundaron un club de inversionistas, que ofrecía obtener grandes ganancias en poco tiempo.
El club de inversiones, se trataba de un esquema de estafa piramidal.
Durante el transcurso de la cinta Billionaire Boys Club, un hombre llamado Ron Levin se une al club. Los problemas comienzan a surgir, cuando Ron Levin le roba el dinero a Joe Hunt.
Joe Hunt busca vengarse y recuperar el dinero que le robó Levin, y por eso planea asesinarlo, para evitar que la noticia se dé a conocer.
Al final de la película Billionaire Boys Club, Joe Hunt es arrestado y condenado por el asesinato y el fraude del club de inversionistas.
En la trama de la película, Joe Hunt no mata a sus padres, pero sí asesina a uno de sus socios. Es muy probable que ver la secuencia del asesinato, es lo que haya influido en los hermanos Menéndez para llevar a cabo sus crímenes.
Durante el juicio el psicólogo de los hermanos Menéndez, declaró que los acusados le habían confesado que el ver la película de Billionaire Boys Club los había inspirado para cometer sus crímenes.
Sin embargo, no se sabe bien qué aspecto de la cinta fue lo que realmente los inspiró, o lo que los llevó a asesinar a sus padres.
¿Qué hicieron los hermanos Menéndez?
La noche del 20 de agosto de 1989, Lyle y Erik Menéndez dispararon a sus padres con escopetas en la sala de su casa, lo que resultó en la muerte inmediata de ambos.
Inicialmente, los hermanos no fueron considerados sospechosos, gracias en parte a su actuación en el funeral y las entrevistas posteriores, donde se mostraron como hijos afligidos.
Gastaron una gran cantidad de su herencia en los meses siguientes en coches de lujo, viajes costosos y otros lujos, lo que eventualmente levantó sospechas.
José Menéndez, un inmigrante cubano, se había hecho un nombre en la industria del entretenimiento en Estados Unidos, alcanzando posiciones ejecutivas en RCA Records y luego en LIVE Entertainment. Kitty Menéndez, por su parte, era una ama de casa que había sido profesora.
La familia vivía un estilo de vida de ricos, pero detrás de las puertas cerradas de su lujosa residencia, las cosas eran menos perfectas.
Los hermanos afirmaron haber sufrido abusos físicos y emocionales por parte de sus padres, un elemento que jugaría un papel crucial en su defensa durante los juicios.
Durante el juicio, se revelaron detalles de los presuntos abusos que los hermanos habrían sufrido, argumentando que el miedo y el desespero los llevaron a matar a sus padres. La fiscalía, por otro lado, presentó el caso como un acto de codicia, destinado a apoderarse de la fortuna familiar.