Italia.- Septiembre 7 del 2025.- (Vanessa Arteaga / AFP).- El papa León XIV canonizará hoy a dos italianos, uno es Carlo Acutis (1991-2006), el primer santo millennial, que difundió su fe católica en internet; y el otro es Pier Giorgio Frassati (1901-1925), un apasionado del alpinismo, conocido por su compromiso social y espiritual.
La canonización de Acutis, fallecido por leucemia a los 15 años, debía llevarse a cabo el 27 de abril, pero tuvo que ser pospuesta debido a la muerte del papa Francisco.
Acutis era muy talentoso en informática y creó una exposición digital sobre los milagros eucarísticos, lo que le valió el apodo de “influencer de Dios” o “ciberapóstol”.
Acutis, nacido en Londres en 1991 en el seno de una familia italiana acomodada y poco practicante, creció en Milán y mostró desde muy temprana edad mucho fervor religioso.
Fue beatificado en 2020 y el Vaticano le atribuye dos milagros que lo califican para ser canonizado: la curación de un niño brasileño con una rara malformación del páncreas y la de una estudiante costarricense gravemente herida en un accidente. En ambos casos, sus familias habían invocado al adolescente para que intercediera.
Mientras que Pier Giorgio Frassati murió hace 100 años. Nació en Turín en el seno de una familia burguesa y rompió con la trayectoria de su padre, senador y fundador del diario La Stampa, para ponerse al servicio de los pobres y enfermos de su ciudad.
Estudiante de ingeniería, deportista, apasionado de la montaña y miembro de la Acción Católica, resumía su ideal en el lema “Verso l’alto” (Siempre hacia lo más alto).
Fallecido a los 24 años a causa de la poliomielitis, fue erigido por la Iglesia católica como modelo de caridad.
Más de 30 años después de su beatificación por Juan Pablo II en 1990, el Vaticano reconoció un segundo milagro a finales de 2024: la inexplicable curación de un joven estadunidense en coma.
La canonización, que sigue a la beatificación, es el resultado de un proceso largo y meticuloso y sólo puede ser aprobada por el Papa.
Esta decisión es objeto de una investigación del Dicasterio para las Causas de los Santos, en la que especialistas como médicos y teólogos se encargan de evaluar si hubo milagros, que en general son curaciones sin una explicación científica.
La ceremonia de canonización, la primera para el papa León XIV desde su elección en mayo, tiene lugar en pleno Jubileo, el “Año Santo” de la Iglesia católica, para el que ya han acudido a Roma más de 24 millones de personas, según el Vaticano.
Las tres condiciones:
El beato que será canonizado debe haber fallecido hace al menos cinco años.
Haber llevado una vida cristiana ejemplar.
Realizar al menos dos milagros, uno de ellos después de la beatificación. En casos de mártires, sólo se necesita un milagro comprobado.
RECIBE COMUNIDAD LGBTQ+
Unos mil 400 católicos LGBTQ+ y sus familiares, procedentes de distintos países, realizan este fin de semana una peregrinación al Vaticano para participar en el Jubileo de la Iglesia (organizado cada 25 años), una señal importante hacia una mayor diversidad en la institución católica.