CIUDAD DE PUEBLA, Pue. – Octubre 24 del 2025.- Mediante una conferencia de prensa, el arqueólogo e historiador Eduardo Merlo Juárez, asesor cultural de la UPAEP, ofreció una reflexión sobre la riqueza simbólica y el profundo significado del Día de Muertos, una de las tradiciones más representativas de México.
El arqueólogo destacó que, a diferencia de otras culturas donde la muerte se asocia con el dolor y el luto, en México se celebra con “alegría y color”, como una muestra de amor hacia quienes han partido. Esta visión, surge de la fusión de elementos prehispánicos, coloniales y cristianos, donde prevalece la creencia de que los difuntos no sufren, sino que descansan y regresan cada año a convivir con sus seres queridos.
Merlo Juárez resaltó que para las personas es de gran importancia las ofrendas, puesto que representan un banquete simbólico con los platillos favoritos de los fallecidos, ya que se cree que “los muertos vienen a comer”. La luz de las velas, añadió, busca brindarles un entorno cálido y acogedor, iluminando el camino desde su lugar de descanso, considerado oscuro.
Además, Indicó que la celebración formal abarca del 28 de octubre al 2 de noviembre, aunque en muchas comunidades indígenas la preparación comienza desde finales de septiembre. Entre las costumbres más antiguas se encuentra la de ofrecer comida a los perros, considerados guías espirituales que ayudan a las almas a cruzar el río que separa la vida de la muerte.
Para Balance Diario, el arqueólogo Eduardo Merlo Juárez, señaló que ha habido una “revitalización” del Día de Muertos entre los jóvenes, tras un periodo en el que la tradición había perdió fuerza ante la influencia del “Halloween”. Explicó que esta última, al ser una cultura reciente, “no puede vencer a una tradición tan larga y secular como la nuestra”.
Merlo Juárez señaló que actualmente se observa un renovado interés por las costumbres mexicanas, con más jóvenes elaborando calaveras, colocando ofrendas y participando en las celebraciones caracterizados como Catrinas y Catrines.
Además afirmó que esta evolución demuestra que la tradición “va para adelante y con más fuerza que nunca”, ya que la cultura mexicana es dinámica y se ha
enriquecido con nuevos elementos como las Catrinas, los alebrijes, los desfiles y los carros alegóricos.









