MADRID.-Julio 11 del 2024. (EFE).— Un equipo de científicos estadounidenses descubrió una hormona que fortalece los huesos y mantiene fuertes los de las mujeres lactantes.
El hallazgo podría ayudar a curar fracturas óseas y tratar la osteoporosis, que afecta a más de 200 millones de personas en el mundo.
El equipo, formado por investigadores de la Universidad de California en San Francisco y en Davis, demostró en un experimento con ratones que esta hormona, conocida como cerebral materna (CCN3), aumenta la densidad y la resistencia óseas.
El estudio, cuyos detalles se publicaron ayer en la revista “Nature”, descubrió la razón por la cual los huesos de las mujeres se mantenían robustos durante la lactancia, incluso cuando el calcio se extrae de los huesos durante esa etapa.
De hecho, “si no hubiéramos estudiado ratones hembra, lo que por desgracia es la norma en la investigación biomédica, podríamos habernos perdido este descubrimiento”, advierte Holly Ingraham, autora principal del artículo y profesora de farmacología molecular celular en San Francisco.
Por eso, entre otros motivos, este estudio “subraya lo importante que es observar tanto a los machos como a las hembras a lo largo de la vida para obtener una comprensión completa de la biología”, indica.
Más de 200 millones de personas en el mundo padecen osteoporosis, un grave debilitamiento de los huesos que puede desembocar en fracturas frecuentes.
Las mujeres corren riesgo alto de osteoporosis después de la menopausia por la disminución de los niveles de estrógeno, que favorece la formación de hueso.
Pero aunque los niveles de estrógeno también son bajos durante la lactancia, la osteoporosis y las fracturas óseas son mucho más raras en este período, lo que sugería que había otros factores que promueven el crecimiento óseo.
En estudios anteriores, el laboratorio de Ingraham descubrió que los ratones hembra lograban aumentos específicos de la masa ósea y aunque sospechaban que una hormona de la sangre era la responsable de los huesos superfuertes, no pudieron encontrarla.
En el nuevo trabajo, Ingraham y sus colaboradores llevaron al cabo una búsqueda exhaustiva de esta hormona que fortalece los huesos y finalmente señalaron a CCN3 como el factor responsable en las hembras mutantes.
Al principio, el equipo se sorprendió por este resultado, ya que CCN3 no encajaba en el perfil típico de una hormona segregada por las neuronas.
Sus dudas se desvanecieron tras encontrar CCN3 en la misma región cerebral en ratones hembra lactantes.
Sin la producción de CCN3 en estas neuronas seleccionadas, las ratonas lactantes perdían rápidamente masa ósea y sus crías empezaban a adelgazar, lo que confirmaba la importancia de la hormona para mantener la salud ósea durante la lactancia.
Desde el descubrimiento, denominan a la CCN3 hormona cerebral materna (HCM).
Pruebas con ratones macho y viejos.
Al aplicar estrategias para aumentar la CCN3 circulante en ratones adultos jóvenes y hembras o machos mayores, su masa ósea y su fuerza aumentaron en el transcurso de semanas.
En algunos ratones hembra que carecían por completo de estrógenos o eran muy viejos, la CCN3 fue capaz de más que duplicar la masa ósea.
Los investigadores tienen previsto realizar estudios en el futuro sobre los mecanismos moleculares de la CCN3, sus niveles en mujeres lactantes, así como el potencial de la hormona para tratar diversas afecciones óseas.
“La pérdida de masa ósea no sólo se produce en mujeres posmenopáusicas, sino también en supervivientes de cáncer de mama que toman determinados bloqueantes hormonales, en atletas de élite más jóvenes y altamente entrenadas, y en hombres mayores cuya tasa de supervivencia relativa es inferior a la de las mujeres tras una fractura de cadera”, explica Ingraham.
“Sería increíblemente emocionante que CCN3 pudiera aumentar la masa ósea en todos estos escenarios”, concluye.
EstudioAplicación
Científicos de Estados Unidos realizaron un experimento con ratones macho y hembra.
Búsqueda y resultado
La profesora Holly Ingraham y sus colaboradores llevaron al cabo una búsqueda exhaustiva de la hormona cerebral materna (CCN3), que fortalece los huesos.